El año electoral casi paralizó el Concejo Deliberante de San Miguel de Tucumán. Hace 140 días que no hay debates en el recinto. La última vez que se discutieron y aprobaron ordenanzas para los vecinos de la Capital fue el 15 de diciembre de 2022. Desde entonces, los ediles ocuparon sus bancas solamente el 1 de marzo, para escuchar el discurso que brinda el intendente cada año en la apertura de las sesiones ordinarias.
El motivo transversal de la fuerte reducción de la actividad institucional es que los 18 concejales que integran el cuerpo deliberativo están abocados a la campaña proselitista: todos se presentan como candidatos en las elecciones que se desarrollarán el 14 de mayo. La mayoría buscará retener la banca que obtuvo en 2019, pero hay quienes aspiran a llegar a la Legislatura o a la Intendencia.
Los ediles consultados evitaron hacer declaraciones ante los micrófonos. En off, sin embargo, coincidieron con que es un parate lógico por el año electoral, en especial en esta ocasión que los comicios se desarrollan tan tempranamente. Oficialistas y opositores aseguraron que no hay temas trascendentes por debatir en el recinto y afirmaron que hay reuniones de comisiones, aunque con menor asiduidad. De todos modos se dejó en claro que, de haber alguna emergencia, el cuerpo legislativo municipal está en condiciones de sesionar.
A fines de marzo ingresó al edificio de Monteagudo y San Martín un pedido de aumento de la tarifa de taxis, lo cual generó ruido y controversia entre los vecinos. Algunos ediles mencionaron en su momento que no era prudente tratar el tema dado que aún no habían cerrado las paritarias. A su vez, remarcaron que las dificultades económicas por el proceso inflacionario las padecen toda la sociedad, no solo los choferes de taxis.
En el peronismo
El bloque mayoritario del Concejo es el del Frente de Todos y cuenta con ocho integrantes. Su presidente, Ernesto Nagle, buscará continuar como concejal durante cuatro años más. Encabeza la nómina de la lista oficial Frente de Todos por Tucumán. También intentarán retener su escaño, aunque por otros acoples: el presidente del Concejo Fernando Juri (primero en la lista Tucumán para la Victoria); Gonzalo Carrillo Leito (encabeza la lista Multiplicar Lealtad); José Luis Coronel (Activar Frente de la Lealtad, en segundo término); María Elena Cortalezzi (lidera la nómina del Frente Provincial); y Emiliano Vargas Aignasse (primer candidato en Tucumán en Positivo).
Dos ediles intentarán “dar un salto” y cambiar la banca del cuerpo vecinal por la del palacio espejado de Muñecas 951: la vicepresidenta del Concejo, Sara Assan (encabeza la nómina de candidatos del acople La Marea Verde), y David Mizrahi (se ubica en el undécimo lugar de la lista de Tucumán para la Victoria).
Los aliados a Alfaro
Del bloque político de Juntos por el Cambio, tres de los seis ediles pugnarán por un nuevo mandato en el Concejo Deliberante. Daniel Alfaro, primo del intendente saliente Germán Alfaro, encabezará el acople oficialista municipal Viva la Ciudad. Está secundado por su colega de bancada Sandra Miranda. También intentará continuar hasta 2027 en el cuerpo el concejal Cristian Petersen (acople Compromiso con el Pueblo).
Los alfaristas que en estos comicios buscarán llegar a la Cámara provincial son: el actual presidente de la bancada de JxC, Agustín Romano Norri (encabeza la nómina de Partido Inclusión Social); Rodolfo “Jhonny” Ávila (segundo en la lista de Viva la Ciudad, que lidera Domingo Amaya); y José “Lucho” Argañaraz (tercero en el acople Frente Pueblo Unido, que encabeza José Cano).
En el bussismo
En el bloque de Fuerza Republicana la situación es similar a la de los otros espacios, por una particularidad: el presidente de la bancada, Eduardo Verón Guerra, no sólo buscará llegar a la Legislatura (se ubica segundo en la nómina de candidatos, detrás de Ricardo Bussi), sino que también se postula para ser intendente de la Capital.
De los demás bussistas, intentarán un segundo periodo en el Concejo los ediles Ramiro Ortega, quien encabeza la lista republicana; Liliana Leiva, tercera candidata en la nómina; y María Belén Espinosa, quinta en el espacio.
La Legislatura sólo sesionó una vez este año
El Poder Legislativo de la Provincia también disminuyó considerablemente su actividad institucional. En lo que va del año hubo solamente un debate, a fines de enero, para tratar el DNU por las obras de reparaciones en el dique de El Cadillal. Desde entonces la actividad institucional se redujo a algunos encuentros de tintes políticos, distinciones para tucumanos destacados, algunos proyectos de ley y esporádicas reuniones de comisiones. El vicegobernador había analizado convocar a una Labor Parlamentaria para trazar una posible sesión previa a los comicios, pero dicho encuentro con los presidentes de bloque nunca se concretó.